Colombia busca alternativas ante la incertidumbre de la energía hidroeléctrica
VU
Especialistas enfatizan que, aunque la transición hacia nuevas tecnologías es clave, también es fundamental optimizar la gestión de los embalses existentes para garantizar un suministro energético confiable en el futuro.
La energía hidroeléctrica ha sido la principal fuente de electricidad en Colombia, cubriendo aproximadamente el 77% del consumo energético nacional. Sin embargo, recientes estudios de la Universidad Nacional de Colombia (Unal) advierten sobre las crecientes dificultades que enfrenta el sector, principalmente debido a la variabilidad climática, la disminución de los recursos hídricos y los conflictos ambientales relacionados con las grandes represas.
Uno de los mayores retos es mantener un suministro estable de agua en los embalses, lo que impacta directamente la producción de electricidad. En el país, la comercialización de energía se basa en subastas de energía firme, donde las empresas acuerdan entregar una cantidad específica de kilovatios diarios. No obstante, las sequías recientes han dificultado el cumplimiento de estos compromisos, lo que ha derivado en un aumento de las tarifas eléctricas, como se evidenció a finales de 2024.
Además, la alta dependencia de las hidroeléctricas hace que el sistema energético sea vulnerable a fenómenos climáticos extremos como El Niño y La Niña, que pueden alterar la disponibilidad del recurso hídrico. Esta incertidumbre ha generado dudas sobre la rentabilidad y sostenibilidad de nuevas inversiones en este tipo de infraestructura, ya que la evaporación del agua y los periodos de escasez prolongada pueden afectar su viabilidad.
Para hacer frente a esta situación, Colombia está explorando nuevas alternativas que permitan diversificar su matriz energética. En la subasta de energía programada para 2027 y 2028, se prevé la incorporación de 4.441 MW provenientes de plantas solares, lo que refleja un creciente interés en fuentes renovables menos dependientes del agua. Sin embargo, especialistas enfatizan que, aunque la transición hacia nuevas tecnologías es clave, también es fundamental optimizar la gestión de los embalses existentes para garantizar un suministro energético confiable en el futuro.
fuente: agronegocios.co
foto: enelgreenpower.com