Cae el rendimiento del tomate en Bahía por el calor extremo y la sequía
Los bajos niveles de los embalses provocan cambios en los calendarios de cultivo y en las zonas de siembra.
De febrero a marzo de 2025, los cultivos de tomate de Irecê, en Bahía (Brasil), se vieron gravemente afectados por las altas temperaturas y la escasez de precipitaciones, lo que provocó un descenso significativo del rendimiento en la cosecha de abril. Según los medios de comunicación locales, las temperaturas medias alcanzaron los 35°C, mientras que las precipitaciones sumaron sólo 15,4 mm, muy por debajo de las normas estacionales.
Estas condiciones perturbaron el desarrollo de las plantas y aumentaron la presión de las plagas, sobre todo de moscas blancas y barrenadores. El problema se agravó por el escaso uso de materiales vegetales resistentes o tolerantes a las plagas. Sin embargo, la Tuta absoluta (mosca minadora del tomate) fue menos grave esta temporada que en años anteriores.
Los rendimientos cayeron de una media de 300 cajas por cada 1.000 plantas en marzo a 200-250 cajas en abril, un fuerte descenso respecto a las 350 cajas registradas en el mismo periodo del año pasado. La cosecha de abril procedía de cultivos trasplantados en enero y febrero, durante el pico de calor.
Debido a las escasas reservas de agua, los productores están ajustando las estrategias de plantación de los distintos cultivos, en previsión de una posible escasez de riego. En la región no se utilizan actualmente técnicas de injerto ni de invernadero. Se espera una mejora del rendimiento de los tomates trasplantados a partir de mayo, cuando suelen empezar las condiciones más frescas.
fuente: hfbrasil.org.br
foto: seedstrust.com