Aguacateros luchan contra el escarabajo mortal en Málaga y Granada
VU
La situación sigue siendo preocupante para los productores de aguacate de la región.
Los cultivadores de aguacate de las provincias de Málaga y Granada, en el sur de España, se enfrentan a tiempos difíciles. Una grave sequía lleva cinco años afectando a sus cultivos, y ahora ha surgido una nueva amenaza: un diminuto escarabajo llamado Euwallacea fornicatus, también conocido como escarabajo de la ambrosía.
Este insecto es tan pequeño que resulta difícil verlo a simple vista. Se detectó por primera vez en 2023 en tres fincas de Motril, Granada. Desde entonces, se ha convertido en una gran preocupación para los agricultores locales. El escarabajo y un hongo que transporta han sido declarados plaga oficial por la Junta de Andalucía.
El 12 de febrero de 2025, Ramón Fernández-Pacheco, portavoz regional de agricultura, dijo que el gobierno está ultimando planes para ofrecer compensaciones a los agricultores cuyos cultivos de aguacate hayan sido destruidos por el escarabajo. Aseguró que el proceso para solicitar estas ayudas será lo más rápido posible porque la situación es muy preocupante.
Las autoridades empezaron a tomar medidas en cuanto se sospechó de la presencia del escarabajo. En diciembre de 2023 colocaron 25 trampas alrededor de las explotaciones afectadas. Estas trampas ayudan a detectar el escarabajo para poder identificar y eliminar rápidamente los árboles infectados. A pesar de estos esfuerzos, los primeros escarabajos no se capturaron hasta el verano de 2024.
Tras confirmar la presencia del escarabajo, el Gobierno colaboró con el Ayuntamiento de Motril para informar a los agricultores de la situación y de las medidas que debían tomar. En octubre de 2024, el escarabajo se detectó por primera vez en una plantación de aguacates. Desde entonces, se han seguido realizando controles y pruebas periódicas.
En diciembre de 2024, el gobierno declaró oficialmente que el escarabajo era una plaga y describió las zonas afectadas y las medidas de control necesarias. En diciembre y enero se colocaron más trampas en zonas de Granada, Málaga y Huelva.
Los agricultores con cultivos infectados deben seguir normas estrictas para evitar la propagación del escarabajo. Entre ellas figuran la realización de pruebas en los árboles para detectar la presencia del escarabajo, el uso de plaguicidas autorizados, la poda o tala de los árboles infectados y la destrucción de los residuos vegetales. También hay restricciones para compartir equipos agrícolas, contenedores y vehículos. Las herramientas y los materiales deben desinfectarse adecuadamente.
La situación sigue siendo preocupante para los productores de aguacate de la región, pero el gobierno está vigilando de cerca el problema y trabajando con los agricultores para evitar daños mayores.
fuente: surinenglish.com
foto: ucanr.edu